Muy cerca de arribar a un año de que bandas ligadas al narcotráfico asesinaran en un enfrentamiento a tiros a la señora Ana Antonia Rodríguez, en el barrio La Yagüita de Pastor, de Santiago, los mismos delincuentes volvieron a repetir la acción la pasada semana en el Callejón de Pochún, del ensanche Espaillat, en la misma provincia.
En esta ocasión los muertos suman tres, que eran parte de ambas bandas enfrentadas por el negocio de las drogas, pero el 13 de febrero del año pasado (2020) los asesinos acribillaron a Doña Antonia, de 63 años de edad y madre de cinco hijos, en su misma vivienda cuando penetraron detrás de un antisocial, que en la huida se refugió en su hogar.
La Policía -como siempre- con el mismo clichet, informó que buscaba a los asesinos, de Doña Ana Antonia Rodríguez, pero al parecer andaban por la Luna o por Marte, porque el asesino principal, lo tenían entre ellos, pues no sólo seguía operando, sino que después del crimen había participado en muchos enfrentamientos por disputa de puntos de drogas o por rencillas.
E inclusive el sujeto tenía una Orden de Arresto, la No. 4278-2020, también por propinarle golpes en la cabeza al joven Ray Castillo Reyes, de 24 años, en el mismo sector donde residía la señora.
«Hay que acabar con la delincuencia en esta zona, hoy fue mi madre a la que mataron. Como hija espero que se haga justicia y sean apresados y condenados», expresó Marilyn Rodríguez.
Entonces queremos llamar la atención de la señora Procuradora General de la República, Miriam Germán Brito, que ordene una investigación de quien o quienes tenían a este delincuente entre los ciudadanos de bien. Y dejar claro que este enfrentamiento donde pudo caer otra u otras Doña Ana Antonia, es responsabilidad de las autoridades, ya sea judiciales o policiales o de ambas.
Pues no se concibe que un delincuente asesino estuviese un año, agregando fechorías a su historial delictivo, ante la vista de todos, menos de las autoridades. O Doña Ana Antonia, «no valía media guayaba podrida» o hay cómplices.
Y más aún, lo que se comenta y se sospecha en Santiago, es que esta cosa que le llamaban Adonis Alejandro Taveras, alias -El Poli-, no estaba herido como para morir, sino que «lo murieron», para que no delatara.
El asesinato de la señora Ana Antonia Rodríguez
Se dijo que regresaba del colmado donde fue a comprar azúcar, alrededor de las 9:30 de la noche, y como se costumbre y por confianza en estos barrios dejó la puerta abierta, y al delincuente huír de la persecución penetró a su hogar.
Los delincuentes, que eran cinco, también penetraron a la vivienda para asesinar a Ray Castillo Reyes, de 24 años, a quien perseguían supuestamente por viejas rencillas con otro grupo que días antes agredió a un integrante de la banda, y es ahí como asesinan a la mujer.
Las autoridades señalaron como responsables a Castillo Reyes y a los elementos identificados como El Poli, Ñeñe, El Cüeiche, El Piro y Brayam, todos residentes en el barrio El Maizal.
Desde hace varios años, La Yagüita de Pastor reporta el mayor número de muertes violentas, en su mayoría registrada durante enfrentamientos entre bandas rivales y donde caen abatidas personas ajenas a las riñas.
Castillo Reyes, narró que al ver la presencia de dichos desaprensivos emprendió la huida y logró penetrar a la casa de Ana Antonia Rodríguez, por lo que los individuos hicieron varios disparos, impactando dos de ellos a la dama. Este apenas tenía tres semanas que se había mudado a la barriada y según los parientes de la mujer asesinada, no presenta signos de ser persona violenta o ser parte de grupos armados.
El equipo técnico de la Policía Nacional recolectó 10 casquillos de pistola calibre nueve milímetros, un proyectil mutilado, una cápsula y una piedra ensangrentada, pera para nada, pues el delincuente principal andaba como «Pedro, por su casa».
En esta balacera
Cayeron los delincuentes Francisco Adolfo de la Cruz, alias -El Negrito-, de 37 años de edad, y Wander de Jesús Rodríguez, alias -El Coro, de 29, fué un tumbe de drogas entre bandas. Y el principal, el tercero, Adonis Alejandro Taveras, alias -El Poli-, «murió» en el hospital.
Mientras resultaron heridos Raudys Silvestre Brito Gómez, alias -Randy-, de 39 años de edad, y Robert Sánchez Tejada, de 29.
Se encuentran prófugos y están siendo perseguidos por la policía Claudio Sebastián Grullón Liriano, alias -El Mello-; Julio Ariel Alberto Capellán, alias -Julito-, y los conocidos como Carlos Anemia y -Piro-
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